No vas a tramitar tu próxima tarjeta de crédito, la vas a descargar.

Sep 20 / Marco Rojas Dir. Educativo

El Consumo y las Tarjetas de Crédito en México.

Los mexicanos somos una sociedad a la que le gusta el consumo y así lo refleja las más de 30 millones de tarjetas de crédito activas se tienen registradas según datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNVB), por otro lado la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2022 arrojó que el 47.9% de la población mexicana tiene al menos un crédito activo, que representa un incremento de .5% respecto del 2021.

Evidentemente los más encantados con los consumidores mexicanos son los bancos, quienes están más que dispuestos a emitir tarjetas a los clientes al por mayor y no es para menos, ya que México se encuentra entre los países más rentables en productos de crédito. Algunos datos para ilustrar; la comisión anual promedio de las tarjetas de crédito es de $600 pesos, la comisión por disposición en cajeros automáticos ronda los $60 pesos ya con todo e impuestos. Si hablamos de la comisión por pago tardío podemos encontrar comisiones de hasta el 25% del monto endeudado, elevando el CAT hasta el 80-90 por ciento cuando no se hacen paga el total de la cuenta.

Estas comisiones se traducen en ganancias millonarias para los bancos, rubro en en el que los primeros puestos para 2022 se los llevan Banco Santander con $20,918 millones de pesos mientras que el segundo puesto se lo lleva BBVA México con $18,718 millones de pesos según datos de la propia CNVB, cabe destacar que ambos bancos de origen Español reportaron ganancias mayores en sus filiales mexicanas que en su propio país de origen. 

La Disrupción de las Empresas FINTECH en el Mercado Bancario.

Si bien la oferta en el mercado crediticio sigue siendo dominada por los bancos tradicionales, las reglas del juego comenzaron a cambiar de manera vertiginosa a partir de marzo del 2018, cuando se hizo oficial la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera mejor conocida como Ley FINTECH. Ha sido tal la disrupción de las famosas empresas FINTECH en la escena bancaria que ahora son los propios bancos los que acusan de competencia desleal por la facilidad que tienen estas empresas de ofrecer productos innovadores, de fácil acceso, mucho menos burocráticos y con beneficios claramente más atractivos como rendimientos más elevados y claro, comisiones más bajas.

Y claro, quien va a querer ir a una sucursal bancaria a hacer fila cuando desde cualquier smartphone, bajando una app y en cuestión de minutos puedes tener una cuenta de débito, una cuenta de inversión, productos de créditos como tarjetas, créditos personales, bancarios e hipotecarios. Las tarjetas te llegan a tu domicilio a los pocos días de hacer el trámite, son operadas o por VISA o Mastercard así que no tienes problemas para realizar pagos en cualquier comercio ya sea físico o en línea. Un aspecto muy interesante es que muchas de estas tarjetas de los ahora llamados bancos “digitales” ofrecen programas de recompensas que te devuelven dinero en efectivo, si, dinero contante y sonante que puedes usar para pagar la misma tarjeta, transferir, retirar en un cajero. Esto hace parecer como una chatarra a los puntos de recompensas que jamás logras entender del todo cómo se acumulan, como se gastan o canjean, quien va a querer los sartenes si literal te dan ¡Dinero por comprar!

En este segmento uno de los más recientes jugadores es el Banco Vexi, quien cuenta con autorización por parte de la CNVB y quien a inicios de 2023 realizó de manera satisfactoria una ronda de capital por US$8M (ocho millones de dólares) para seguir con sus planes de expansión, por supuesto que los bancos tradicionales no se van a quedar atrás, ya comenzaron a sacar tarjetas “digitales” o bien a tener sus propios bancos en línea como Banregio con Hey Banco. No cabe duda de que en los años siguientes la pelea por este segmento de mercado será brutal, lo cual tendrá un impacto beneficio en los consumidores mexicanos ya que el incremento de la oferta no sólo obliga a mejorar la experiencia del usuario con mejores productos, sino que también incrementa la inclusión financiera.